Descubre Villar de Plasencia, un pueblo con historia

Web oficial del Ayuntamiento de Villar de Plasencia

Historia

La localidad de Villar de Plasencia esta históricamente unida a la Vía de la plata ya que parte de ella trascurre por esta localidad. Igualmente en dicha localidad comenzaba el camino real a Plasencia.

Villar de Plasencia, conserva diversas inscripciones romanas de la ciudad romana de Cáparra. 

La dominación romana fue muy importante para la consolidación de la comarca, dada la cantidad y calidad de los vestigios que se encuentran, desde epígrafes a vestigios arquitectónicos. Construyeron la Calzada de la Plata, que atraviesa de norte a sur el Valle del Ambroz. Las termas romanas de Baños de Montemayor, el Puente de Abadía, y la Villa Romana de la Granjuela (situada en Casas del Monte).  En el cerro de Piedraslabradas se conservan restos de un pequeños templo romano que mira al valle por donde discurre la calzada romana.

inscripcion villar de plasencia

El origen histórico, de la población, más remoto del que actualmente se tiene conocimiento es de época romana, ya que se han encontrado múltiples inscripciones latinas en numerosas casas del municipio. Los datos relativos a esta etapa histórica no sorprenden, ya que el asentamiento de Villar de Plasencia tiene una clara proximidad a Cáparra, distante tan sólo, dos leguas de la bien documentada mansio romana. Por otra parte, también ilustra su influencia romana la proximidad a Baños de Montemayor donde la Vía de la Plata separa las diócesis de Coria y Plasencia.

Del corto reinado visigodo se encuentran restos de esta época en las pizarras de Abadía. Con la llegada al valle de los árabes, cultivaron el valle durante cuatro siglos dejando vestigios de su cultura: el palacio renacentista de Sotofermoso en Abadía, llamado de los “Duques de Alba” con jardines renacentistas y claustro de estilo mudéjar.
Los judíos tras la invasión árabe del 711, vivieron sin molestias ya que los árabes se mostraron tolerantes con las religiones de El Libro. El legado judío dejó una huella de sus siglos de permanencia en el Barrio Judío de Hervás, conjunto histórico-artístico y miembro de la Red Nacional de Juderías. Éste barrio se agrupa en torno al antiguo Castillo templario. Esto debió seguir así hasta la llegada de los almorávides, más intolerantes.
En época de reconquista participaron en todo el proceso de repoblación de estas tierras. En la reconquista tuvo en tratamiento por parte de los castellanos semejante al resto de la trasierra. De la época se encuentra la zona de los castillos de Segura y otro cercano en Granadilla.

De Casas del Monte se encuentran Pilas y tumbas antropomórficas que abarcan desde el periodo del Imperio Romano hasta el año 1300 aproximadamente. De la época romana quedan restos en la Granjuela, en la que se ha encontrado un mausoleo octagonal del siglo IV al lado de las ruinas de la villa romana.

La zona a partir de la reconquista se presentaba despoblada. El proceso repoblador se inicia con la reconquista de Plasencia por Alfonso VIII de Castilla y refundada en 1186 sobre un lugar despoblado al que se conocía por Ambroz, con el lema «Ut placeat Deo et Hominibus» (para agrado de Dios y de los hombres).
En el año 1189, se convirtió en sede de un nuevo obispado por Bula del papa Clemente III y se le otorgaba jurisdicción sobre Trujillo, Medellín, Monfragüe y Santa Cruz de la Sierra, a la vez que se le concedían unos términos para repoblar que se extendían desde las sierras de Béjar hasta Trujillo.

Desde finales del siglo XII y siglo XIII, paralelamente a la reconstrucción de Plasencia, se inicia el poblamiento de las tierras próximas, formando un gran territorio que se conocía como Tierra de Plasencia. En el siglo XIII, van surgiendo los núcleos que darán lugar a los sexmos del Valle, Traslasierra y Vera. En 1254, ya existian 17 aldeas con sus correspondientes Iglesias.

En la Iglesia de Ntra.Sra. de la Asunción, y en la ermita de San Bartolomé a las afueras de la población, con otros restos como fustes embutidos en la obra y columnas reutilizadas en el pórtico actual, también otra inscripción romana. La ciudad romana se encuentra a una distancia aproximada de 5 km, de Villar de Plasencia.​

En 1792 se construye, por encargo del obispo Lasso, uno de los escasos y mejor conservados ejemplos de la Ilustración extremeña. Se trata del puente y el abrevadero, situados junto al antiguo Camino Real, a la entrada de Villar de Plasencia.

No será hasta 1850, cuando tengamos la primera referencia bibliográfica sobre la Ermita de San Antonio que completa este inmejorable conjunto de carácter popular.